Supe que la vida era otra cosa
cuando enfermó mi madre
…luego enfermé yo…
o fue a la vez….
ya ni lo recuerdo.
Sé qué las sonrisas, el sol,
el canto de los pájaros….
se convirtieron en otra cosa
y el mundo fue menos verde.
En las calles
la gente iba y venía
como siempre.
Y el tiempo lejos de detenerse
siguió avanzando.
Creemos siempre que la realidad es el hoy,
que los momentos son inamovibles
… hasta qué se derrumban.
A partir de ese momento
solo queda huir del gris,correr, salir, escapar…
Insisto: huir del gris.
Construimos nuestra vida
a golpes de subidas y bajadas
casi siempre imperceptibles,
pero algunas veces los vaivenes son bruscos
y entonces, sólo entonces
aprehendemos que la vida
solo es un breve proceso
de constante reinvención.
marzo 3, AM at 11:27 am
Duro y tan cierto, Cris…
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marzo 3, PM at 8:14 pm
Cuando todo se considera una bajada y sin frenos a la vista…
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marzo 3, PM at 8:16 pm
Pero sabes? Cada día me cuesta más reinventarme, demostrar que puedo mutar. Los demás nos ven, o quizá no nos ven, pero nosotros seguimos ahí.
La realidad del hoy va más allá de nosotros mismos
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marzo 3, PM at 8:35 pm
Y tanto que va más allá
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