Caracolea en mis oídos
el sabor de aquellas navidades,
blancas de villancicos y sueños,
en las que todo era posible.
Hoy, abandonada en la nostalgia,
fluctúa mi alma entre aquel sabor feliz
y esta realidad oscura de ausencias.
La vida no es más que una suma
de pérdidas irremplazables
que nos enfrentan
a nuestra soledad como individuos.
No obstante, el recuerdo de los días
de pestiños, de azúcar y canela,
forjaron la esencia de mi hoy
y la memoria de aquellos instantes,
edulcorados de pasadas alegrías,
imprimen una sonrisa
en mi rostro contaminado de lágrimas.
No hay poesía válida
para navidades tristes,
sólo mi amor y tu amor
y esta desgarradora distancia.
un café y un poema 
Bello. Pura sensibilidad dentro de ese halo de tristeza que imprime el recuerdo de nuestra infancia, por la ausencia de aquellos que hicieron de unas fechas (navidad, cumpleaños y celebraciones varias) Un motivo para el dulce recuerdo de las mismas
Bravoooooo Cris, eres un referente para muchas personas en las que yo me incluyo.
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Muchas gracias Montse, van a ser unas navidades duras 😘😘😘
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Cada año es diferente y no conviene afirmar que cualquier tiempo pasado fue mejor. Yo soy feliz por poder disfrutar de la navidad junto a mis hermanos. Siempre han sido ellos los que han colmado de encanto la navidad. Incluso las manos que nos han proporcionado esos deliciosos pestiños sigue animándose a hacerlos de nuevo. Hay que vivir el día a día.
Aún así, la poesía es entrañable y muy bonita.
Gracias por estar con nosotros en Navidad.
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Verdades como puños en tus palabras,que al igual que acarician,desgarran el alma…Cuidate mucho mi estimada
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Gracias cielo
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